Mi vida transcurría como la de cualquier persona sumergida en la monotonía y simpleza que nos ofrece el estilo de la clase media, sin embargo, sumado a eso estaba mi caracter apatico y desinteresado que no solo me separaba del modus de vida "normal", este desinteres provocaba que oportunidades grandes pasaran de largo tomadas de la mano de la diosa ocasión, aun así sumergido en dicha apatía mis ratos acompañados por cuatro verdes paredes no se escapaban por las coladeras cual agua corriente, por el contrario, se concentraban en el estanque inmenso de ideas que durante mucho tiempo a conformando el ambiente de mi pequeño mundo, por lapsos la luz entraba por una rendija solitaria en aquel espacio reducido que me hacia darme cuenta que en el exterior pasaba algo más, eran esos pequeños momentos cuando muy aparte de las salidas obligadas en búsqueda del combustible que exigía mi cuerpo y mi mente era que me atrevia a aventurarme al exterior de mi capa-razón e ir aprendiendo de la experiencia necesaria de la que solo la calle nos puede alimentar.
Durante gran parte de mi vida la apatía constante me había negado expresar mis sentimientos a quienes me rodeaban y aunque mi entorno no era indiferente a mis éxitos o derrotas preferia guardarlos en el bolsillo izquierdo de mi pantalón y dejarlos que se confundieran con la pelusa que se almacenaba y se revolvia con algún pedazo de papel que se disolvia cada que el agua se enfrentaba con aquél pedazo de tela dura y deslavada, el disfrutar y celebrar o lamentar y llorar lo que a los demás interezaba era algo que realmente ni me hiba ni me venia, podía estar mezclado en tal rito y mofarme o ser indiferente sin sentime mal por ello, con este comportamiento hostíl lograba evadir lo que para mi eran estupidas invenciones de hombres melancólicos del pasado, al mismo tiempo con esa foma de ser pensaba que me alejaba del común comportamiento, sin darme cuenta que esa actitud me convertia en parte de otro gran montón de personas que se comportaban parecido a mi y al final seguia siendo parte de algo, seguia siendo un ser inconsiente, plagado de defectos que me habían forjado como ente, pude darme cuenta como mis defectos me separaban y a la vez me unian siempre al mismo circulo, también me superponian como uno mas entre las masas, masas caoticas conformadas por individuos que se ensalsan con sus virtudes y hacen dia a dia una guerra de egos sin darse cuenta que ese es uno mas de sus defectos, toparme con esa realidad me hizo darme cuenta que siempre estuve inmerso en ese montón y que lo estaria hasta el ultimo de mis dias, por el simple hecho de ser un producto social, sin embargo el proceso no fue facil, despues de estar sumergido en un estira y afloja sigo sumergido en el.El proceso que me llevó a darme cuenta que habia fracasado en el intento por ser diferente a los que me rodean fue muy largo y doloroso, sin embargo el resultado final fue muy gratifcante, pues los años de lucha interna y externa fueron despegandose de mi cuerpo como si fueran pedazos de cascara, aun hoy pueden verse los residuos de esta piel colgando de mi cuerpo agarrados cual garrapatas que me recuerdan que mi proceso de cambio aun no ah culminado y que quiza nunca lo haga, pues es claro que hasta el ultimo aliento da muestras de la metamorfosis que sufre nuestro cuerpo, he sido testigo de esto, de como un idividuo puede transformarse y transformar su entorno ya sea para bien o para mal cuando da el último respiro y ni en ese momento es capaz de separarse de sus cadenas sociales, cadenas sin las cuales no seriamos nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario